Hoy, el 21% de la atmósfera es oxígeno, pero unos 2.500 millones de años antes que nosotros, este gas vivificante estaba prácticamente ausente. ¿Cómo llegó a su actual lugar de honor?
El oxígeno es un elemento esencial para la vida tal como la conocemos. Sin él, la mayoría de los seres vivos no podrían sobrevivir. Pero ¿cómo apareció el oxígeno en nuestro planeta?
Se cree que hace aproximadamente 2.4 mil millones de años, la Tierra era un lugar muy diferente a lo que conocemos hoy. En lugar de una atmósfera rica en oxígeno, la Tierra estaba cubierta por una capa de gases cálidos y húmedos.
En esta época, los primeros organismos vivos eran bacterias anaerobias, lo que significa que no necesitaban oxígeno para sobrevivir. En cambio, estas bacterias utilizaban sustancias como el metano y el dióxido de carbono como fuente de energía.
Sin embargo, hace unos 2 mil millones de años, un tipo de bacteria llamada cianobacteria comenzó a producir oxígeno como un subproducto de su fotosíntesis. Esta fue la primera vez que el oxígeno apareció en la atmósfera de la Tierra.
Inicialmente, el oxígeno producido por las cianobacterias se combinó con el dióxido de carbono y otros gases para formar ácidos suaves. Pero a medida que las cianobacterias se multiplicaron y comenzaron a producir más oxígeno, la atmósfera comenzó a cambiar.
Finalmente, después de miles de años, el oxígeno se acumuló en la atmósfera hasta el punto en que comenzó a reaccionar con el hierro de la corteza terrestre, creando rocas de óxido de hierro. Este proceso se conoce como "oxidación".
Hoy en día, el 21% de nuestra atmósfera está compuesta de oxígeno, y es esencial para la vida de muchos seres vivos. Aunque puede ser fácil dar por sentado el aire que respiramos, es importante recordar que es el resultado de miles de millones de años de evolución y cambio en nuestro planeta.